Alburquerque ha cerrado este sábado una nueva edición (la vigésimo tercera) de Contempopránea. El festival que reúne cada año a millares de poperos y seguidores de la música indie deja un buen sabor de boca con una propuesta que este año ha cautivado a tantos seguidores que el «lleno absoluto» se rozaba en las dos noches que conformaban la cita.
Si el viernes eran los granadinos Lori Meyers, homenajeados en esta edición por su vigésimo aniversario, quienes triunfaban y dejaban el listón en lo más alto, la noche del sábado servía para que los esperados IZAL confirmaran su excelente estado de forma con un espectáculo que puso en pie a las tres mil personas congregadas en el paseo de las Laderas.
Antes de ellos, saltaban al escenario Arista Sierra y El buen hijo. Estos últimos llegaban a Contempopránea tras dejar buenas sensaciones en la anterior edición en la que participaron en uno de los acústicos de la piscina. Ya con una buena legión de seguidores, los madrileños cerraban su set con parte de ellos subidos al escenario, en un fin de fiesta que disparaba las pulsaciones de sus incondicionales, entregados al baile frenético.
La bien querida entraba en escena cuando la noche ya avanzaba y el recinto comenzaba a completar su aforo. Las barras y los puestos de comida funcionaban a toda máquina para que los festivaleros cogieron fuerza para los que les esperaba por delante: muchas horas de música y baile sin descanso hasta bien avanzada la madrugada.
Impresionante era el paso de IZAL por Contempopránea. Para la banda liderada por Mikel Izal esta era su segunda vez en el festival -aunque su debut se produjo en 2014 en la alcazaba de Badajoz- y la distancia que han recorrido en estos cuatro años es sideral. Llegaban con su último álbum ‘Autoterapia‘ todavía caliente y el público se entregaba desde el primer momento a la propuesta musical de la banda madrileña.
La recta final de la jornada la protagonizaba Dorian, otro de los grandes de la noche quienes también traían álbum nuevo bajo el brazo y rescataba sus grandes himnos generacionales.
Tras los barceloneses, los mexicanos Zoé, Varry Brava y Fönal, prolongaban la final para finalizar la noche con Jotapop & Retrovisor DJ quienes ponían el cierre a una edición de Contempopránea que resurge este año para recuperar su esplendor pasado.
