Todos los conciertos han completando su aforo de 400 personas

El 25 aniversario del Festival Internacional de Música Folk de Plasencia firmó anoche su última página con una gran acogida en todos los conciertos, que se han celebrado del 19 al 21 de agosto.

La espera para celebrar el 25 aniversario del Festival Folk de Plasencia (Cáceres), un evento referente en la música folk nacional e internacional, ha merecido la pena y ha conseguido el respaldo del público que ha llenado el aforro disponible en las tres noches de conciertos. La Torre Lucía, con un aforo reducido a más del 25% de su capacidad, ha sido testigo de la presencia de público procedente de distintas partes de España, y no solo de la localidad anfitriona. 

El fin de fiesta llegaba este sábado con las actuaciones de Aulaga Folk, Enredadas: Uxía, Martirio, Carmen París y Ugía Pedreira; y BandAdriática.

Después de dos días de conciertos en los que han actuado EnVerea, Xabi Aburruzaga, Gwendal, Los Granjeros, Acetre y Albaluna, la última jornada del Festival comenzaba al final de la tarde con los pasacalles de la Asociación de Tamborileros Santiago Bejar y la cuadrilla de la Albatalía Arboleja.

En Torre Lucía, la última noche arrancó con el grupo extremeño Aulaga Folk. Este conjunto, como el festival, ha sufrido el retraso de la celebración de su aniversario, en su caso de sus dos décadas enriqueciendo la música raíz de Extremadura. La ocasión mereció que dedicasen los temas a las distintas comarcas y parajes de su lugar de origen. Tampoco se olvidaron de las víctimas de la pandemia por coronavirus, para quienes han tocado una composición especial.

A continuación, llegó el turno de Enredadas: Uxía, Martirio, Carmen París y Ugía Pedreira. Su reencuentro no defraudó, la combinación de un talento que les ha valido para transformar la canción popular española, la copla, el canto telúrico gallego, la jota… dejó eclipsada a una audiencia partícipe de este proyecto creativo abanderado por su madurez artística.

El fin de fiesta fue protagonizado por “la banda del mar que une a los pueblos”, BandAdriática. Los italianos desembarcaron por primera vez el escenario del festival llenos de energía, de manera que hicieron vibrar al auditorio con sus ritmos y melodías de las culturas musicales de las costas del Adriático. Sus interpretaciones fueron de lo más animadas, con toda una puesta en escena coreografiada de cada músico, de manera que el público siguió entusiasmado la actuación al compás de sus canciones, haciendo verdaderos esfuerzos para no levantarse y bailar con ellos.

Un festival distinto, pero recuperado.

Al igual que nuestro legado musical permanece vivo gracias a los músicos que se dedican ainterpretar y reinterpretar la música raíz, el Festival Internacional de Música Folk de Plasencia pervive después de sus 25 ediciones y su parón de un año obligado por la pandemia. Para ello ha tenido que adaptarse a las nuevas circunstancias y seguir todas las medidas de prevención frente a la COVID-19 que habían sido establecidas antes de decretar el sábado el nivel de riesgo 3 en Plasencia. Estas han consistido en limitar y reducir el aforo de su sede clásica, el recinto amurallado de Torre Lucía, con butacas distanciadas y asignadas según la llegada y el núcleo de convivencia; controlar la temperatura de cada persona al entrar; disponer de gel hidroalcohólico para la limpieza y desinfección de manos; y seguir los conciertos sentados y con la mascarilla puesta durante todo el tiempo.

La colaboración del público, junto al esfuerzo de todo el equipo profesional para su debido cumplimiento, han hecho posible que el evento haya salido adelante con todas las garantías, señalan desde la organización.